El bloqueo político y la gran incertidumbre todavía presente en los mercados internacionales han paralizado muchas de las inversiones y actuaciones previstas en el sector del transporte y la logística durante el pasado año 2016. Por lo tanto, este año que comienza, el Gobierno central tendrá que hacer frente a casi todos los proyectos previstos en la agenda del año anterior y no llevados a cabo.
Según Dulsé Díaz, portavoz de CETM, el año no ha sido tan bueno como esperaban y creé que la inestabilidad económica y política “ha frenado mucha inversión y modificaciones normativas de importancia”. Díaz también cree que, a la hora de valorar este último ejercicio, hay que tener en cuenta la desaceleración de la actividad que ha sufrido la carretera en el último semestre y que ante esta situación, “no nos queda más remedio que pensar que 2017 tiene que ser mejor”.
En el sector marítimo la situación ha sido muy similar y el crecimiento en el tráfico portuario ha sido plano en los últimos meses. Por ello, Manuel Carlier, director general de Anave, lamenta que “debido posiblemente a la inestabilidad institucional” su principal objetivo de conseguir algunas modificaciones normativas para relanzar la competitividad del Registro Especial de Canarias hayan tenido que “quedar aparcadas”. Además, Carlier ha subrayado que aún queda pendiente la revisión de la legislación sobre el servicio de la estiba.
El sector privado de transporte ferroviario de mercancías también sigue atascado a niveles muy bajos, a pesar de que a lo largo del pasado año ha ganado cuota. Al respecto, Juan Diego Pedrero, gerente de la Asociación de Empresas Ferroviarias Privadas (ARFP), piensa que “la liberalización real del sector sigue siendo un deseo no realizado y el año 2016 no ha supuesto un cambio en esta situación, a pesar de las esperanzas que teníamos en la Rosco como palanca real de liberalización del sector”.
La carga aérea, sin embargo, ha percibido un crecimiento constante de dos dígitos a lo largo del año pasado. Y, según Agapito Maricalva, gerente de ALA, parece que este año los datos serán muy similares. Aún y todo, ha recalcado que “desde el punto de vista de volúmenes parece positivo, pero veremos cómo evolucionan las tarifas de carga, porque al haber menos capacidad carguera, las bodegas de los aviones de pasaje suelen ofrecer tarifas más bajas y ello incide en el negocio de las compañías cargueras puras”.
En el sector transitario el año ha estado marcado por el objetivo fallido de convencer a la Administración para crear una secretaría general de Logística. Para el presidente de Feteia, Enric Ticó, este 2016 no era el momento para plantear esta propuesta debido al carácter provisional del Gobierno y valora “de forma positiva” este año que ha terminado, “ya que ha sido un año puente, dejando atrás la crisis económica del comercio exterior de nuestro país”. De este modo, el presidente de Feteia afronta este nuevo año que ha comenzado con la mirada puesta en la consolidación del crecimiento del negocio del colectivo que representa.
